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Envolverlo es una técnica tradicional que brinda comodidad y seguridad a los recién nacidos, ayudándolos a dormir más profundamente y a sentirse tranquilos en su nuevo entorno. Si bien puede parecer desalentador al principio, dominar el arte de envolver a los bebés es una habilidad que puede beneficiar tanto a los bebés como a los padres por igual. Si quieres saber más de los beneficios de esta práctica ve a nuestro blog 'Swaddle, entabacarlos o bebé burrito: decodificando la controversia'.

 

Paso 1: Reúne todo lo que necesitas

Una manta o manta envolvente ligera y transpirable, o un “swaddle” de velcro o cremallera. Una superficie plana, como un cambiador o una cama. Tu bebé, cómodamente vestido con un pañal, y una camiseta, puede estar en pijama si el ambiente es frío, ten cuidado con sobre calentar. (Puede estar llorando)

 

Paso 2: Prepara la manta

Coloca la manta sobre la superficie, formando un diamante con una esquina apuntando hacia abajo. Dobla ligeramente la esquina superior hacia abajo para crear un borde recto.

 

Paso 3: Coloque a su bebé

Coloca a tu bebé boca arriba en el centro de la manta, con la cabeza apoyada justo por encima del borde doblado. Asegúrese de que los brazos de su bebé estén a los lados. Se ha visto que se calman más si están a los lados estirados que doblados.

Paso 4: Asegure los brazos

 

 

 

Toma la esquina izquierda de la manta y envuélvela suavemente sobre el cuerpo de tu bebé, colocándola cómodamente debajo de su brazo derecho. Asegúrate de dejar suficiente espacio para que las caderas de su bebé se muevan libremente.

 

Paso 5: Crea la bolsa inferior

 

 

Dobla la parte inferior de la manta sobre los pies de tu bebé, metiéndola firmemente detrás de sus hombros. Esto crea una bolsa acogedora para que descansen las piernas de su bebé.

 

Paso 6: Asegure el lado derecho

Finalmente, toma la esquina derecha de la manta y envuelvela sobre el cuerpo de tu bebé, metiéndola debajo de su brazo izquierdo. Asegúrate de que el envoltorio esté ajustado pero no demasiado apretado, para permitir que su bebé respire cómodamente y mueva las caderas. Es decir que puedas deslizar los dedos adentro en el pecho.

 

 

 

Paso 7: Verifique la comodidad y la seguridad

Una vez que hayas envuelto al bebé, acaricia suavemente el pecho de tu bebé y tranquilízalo con palabras tranquilizadoras. Asegúrate de que el envoltorio esté seguro pero no demasiado apretado, y verifica que la cara de tu bebé esté descubierta y visible, sin nada encima de los hombros.

 

Consejos adicionales

• La práctica hace la perfección: no te desanimes si tus primeros intentos no son perfectos. Como cualquier habilidad, envolverlo requiere práctica, así que sigue intentándolo hasta que encuentres una técnica que funcione para ti y tu bebé. Opcionalmente puedes intentar con las mantas que tienen velcro o cremallera, no deben utilizar peso adicional. Esta marca colombiana los produce.
• Mantenlo simple: si bien existen muchas variaciones de técnicas para envolver al bebé, es mejor comenzar con un envoltorio básico y ajustarlo según sea necesario para adaptarlo a las preferencias de tu bebé.
• Vigila a tu bebé: siempre vigile a tu bebé mientras lo envuelve para asegurarse de que esté cómodo y seguro, mientras el proceso puede llorar y calmarse únicamente después de arrullarlo. Si tu bebé muestra signos de malestar o angustia, como irritabilidad o sobrecalentamiento, desenvuélvalo e inténtalo nuevamente o escríbele a nuestros pediatras de Docokids.

El entabacamiento, swaddling o bebe burrito solo se debe hacer hasta que tu bebe se empiece a intentar girar, de los 2 a 4 meses de edad y solo usar mientras duerme.

 

Otros recursos

• Mi blog favorito de este tema es el de Taking Cara of Babies.
• La academia americana de pediatría también tiene un blog que complementa la información de este blog y lo pueden encontrar acá.