Visitar a un bebé recién nacido es una ocasión especial y emocionante para amigos y familiares. Sin embargo, es fundamental recordar que el bienestar y la salud del bebé y de la familia son la prioridad número uno. Los recién nacidos son frágiles, con sistemas inmunológicos aún en desarrollo, por lo que se deben tomar precauciones para protegerlos. En este artículo, los pediatras de Docokids comparten las reglas de oro que todos los visitantes deben seguir cuando conocen a un nuevo miembro de la familia.
Este es un periodo de muchos cambios para la familia que estás a punto de visitar, cambios en las rutinas y momentos que pueden ser de mucha felicidad pero también puede haber angustia y estrés. Antes de realizar tu visita debes preguntar si es el mejor momento y el más oportuno para ir. Las visitas deben ser siempre autorizadas por los padres.
Antes de sostener o incluso tocar al bebé, lava tus manos con agua y jabón o usa desinfectante con base de alcohol. Las manos son una fuente común de transmisión de gérmenes, y los bebés recién nacidos son especialmente vulnerables a infecciones.
Esta es una de las reglas más importantes. Si tienes síntomas de resfriado, gripe, tos, dolor de garganta o alguna enfermedad infecciosa, es mejor posponer la visita. Aunque los síntomas sean leves, un resfriado común en un adulto puede ser peligroso para un recién nacido.
Aunque besar a un bebé puede ser tentador, es importante evitar besar al recién nacido en la cara o las manos. La piel de los bebés es muy delicada y las infecciones virales, como el herpes, pueden ser transmitidas fácilmente a través del contacto directo. Si debes besar al bebé, hazlo en los pies o en su ropita.
Los bebés y los nuevos padres necesitan descansar. Incluso si los padres parecen estar bien, las visitas prolongadas pueden ser agotadoras. Es mejor mantener la visita breve, especialmente en los primeros días o semanas.
Aunque sostener al bebé puede ser un momento emocionante, no presiones a los padres para que te dejen cargar al bebé si no lo consideran oportuno. Algunos padres pueden estar nerviosos o cansados, y está bien que lo expresen. Sé respetuoso y sigue sus indicaciones.
Si realmente quieres ser útil durante tu visita, en lugar de esperar que los padres te sirvan, ofrece tu ayuda. Puedes preguntar si necesitan algo de la tienda, preparar una comida o simplemente ayudar con tareas domésticas. Esto será mucho más apreciado que simplemente sentarte a charlar.
A veces, los visitantes pueden emocionarse demasiado y olvidar que el bebé también necesita espacio. Evita invadir demasiado el espacio del bebé o estar demasiado cerca de él sin el consentimiento de los padres. Además, evita hablar demasiado alto o hacer ruidos fuertes, ya que los recién nacidos pueden asustarse fácilmente.
Los niños pequeños pueden ser impredecibles y, aunque pueden estar emocionados por conocer al bebé, a veces pueden ser portadores de enfermedades, incluso sin mostrar síntomas. Pregunta siempre antes de llevar a otros niños a la visita, y asegúrate de que no estén enfermos.
El humo del cigarrillo y los residuos de nicotina en la ropa pueden ser perjudiciales para los recién nacidos, incluso si no fumas durante la visita. Además, los perfumes o colonias fuertes pueden irritar las vías respiratorias del bebé. Es mejor evitar fumar antes de la visita y no usar fragancias fuertes.
Los primeros días con un recién nacido pueden ser abrumadores. Si los padres necesitan cancelar o reprogramar la visita a último minuto, sé comprensivo. Su prioridad es el bienestar del bebé, y puede que no estén listos para recibir visitas en todo momento.
Visitar a un recién nacido es un momento especial, pero también conlleva una gran responsabilidad. Siguiendo estas reglas de oro, puedes asegurarte de que tu visita sea placentera y segura tanto para el bebé como para los nuevos padres.
En Docokids, estamos aquí para ayudarte con cualquier duda sobre el cuidado de tu bebé o los mejores protocolos para mantenerlo sano y protegido. Haz clic aquí para conocer más consejos y herramientas útiles para el cuidado de tus hijos. Haz clic aquí para conocer nuestros planes.
Escrito por: Felipe Rodríguez