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El ibuprofeno y el acetaminofén son uno de nuestros mejores aliados como pediatras. Los usamos cuando los niños tienen fiebre, cuando tienen dolor, cuando le están saliendo los dientes, cuando tienen gripa, etc..
Los papás los usan tanto que saben cuál es el sabor y la presentación que más le gusta a sus hij@s. Además, son medicamentos que siempre hacen parte del equipaje a la hora de salir de viaje con sus niños.
Pero alguna vez te has preguntado: ¿Por qué nos gustan tanto? ¿Cuáles son los riesgos de estos medicamentos? ¿Cuándo NO debemos usarlos?
Lo bueno
- El acetaminofén y el ibuprofeno son medicamentos relativamente seguros, son fáciles de dar, tomar y formular, pues son de venta libre.
- Los dos medicamentos ayudan a controlar el dolor y disminuyen la fiebre, esto hace que los niños estén menos irritables, coman mejor y, en general, estén más cómodos.
- Ambos funcionan rápidamente: entre 30 minutos y una hora. Duran alrededor de 6 horas (el acetaminofén puede durar un poco menos y el ibuprofeno un poco más).
- El acetaminofén viene en diferentes presentaciones: gotas, jarabe, tabletas para masticar, tabletas normales, supositorios (se pone en el ano/recto) e intravenoso. Esto nos permite encontrar siempre una forma para administrarlo y que el bebé o niño pueda recibir sus beneficios. Adicionalmente, tiene la ventaja que se puede dar a cualquier edad.
- El ibuprofeno lo podemos encontrar como jarabe, tabletas no masticables, e intravenoso. Hace parte de una familia de unos medicamentos conocidos como AINES (por sus siglas), que se encargan de controlar la inflamacion: son antiinflamatorios. Esto quiere decir que ayudan no solo controla el dolor y la fiebre sino que también ayuda disminuir la inflamación,
Lo malo
Acá es donde los dos medicamentos se diferencian un poco:
- El acetaminofén se metaboliza por el hígado, si tu hijo sufre de alguna enfermedad del hígado debes preguntar siempre a tu pediatra antes de usar este medicamento.
- El ibuprofeno tiene un metabolismo principalmente renal y puede causar daño en el riñón, por eso es recomendable que sea formulado de forma individualizada y con el aval de un pediatra SIEMPRE.
- No está recomendado darlo antes de los 6 meses de edad y en las mujeres embarazadas no se puede tomar en el último trimestre de embarazo. Así mismo, no se debe dar a largo plazo, pues puede alterar el funcionamiento de los riñones.
- No viene en tabletas masticables y siempre se debe dar con estómago lleno, es decir, con la comida.
- La presentación más usada en niños es en jarabe. El problema es que esto le sabe mal a algunos niños. Algo bueno es que puedes encontrar diferentes sabores según la marca, y así lograr encontrar uno que le guste a tu hijo.
Lo feo
- El acetaminofén puede ser tóxico para el hígado en dosis altas por lo que se deben revisar las dosis muy de cerca.
- Igualmente el ibuprofeno tiene una dosis tóxica, puede alterar el funcionamiento del riñón y se debe administrar con la dosis escrita por tu pediatra.
¿No sabes cual es la dosis? ¿No estás seguro de cuál de los dos medicamentos usar? ¿Crees que tu hijo no debe tomar ibuprofeno o acetaminofén?
En Docokids estamos para ayudarte 24/7, puedes escoger alguno de nuestros planes disponibles para resolver cualquier duda que tengas acerca de la fiebre en bebes.